Extraído del libro «¡Convertíos! Se acerca el Reino de Dios» de Moisés María Aja de la Cruz
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Vamos a ver cómo se actualizan hoy los graves momentos de la Historia de la Salvación. Citaremos sólo algunos textos:
a-“Como en tiempos de Noé” Nos dice Jesús en el Evangelio:
“Preguntado por los fariseos acerca de cuándo llegaría el Reino de Dios, respondiéndoles, dijo: (…) Como sucedió en los días de Noé, así será en los días del Hijo del hombre. Comían, bebían (…) hasta el día en que Noé entró en el arca, y vino el Diluvio y los hizo perecer a todos” (Lc 17, 20-27).
Era tal el grado de maldad que Dios castigó a la Humanidad de entonces con el Diluvio. Tomemos una muestra en la Revelación Privada: “Hoy el Mundo se ha vuelto peor que (en tiempo) de Noé, de Nínive, de Sodoma y Gomorra. Elegisteis seguir a Satanás, el padre de todas la mentiras, a cambio de los placeres del Mundo y del dinero,…”[1]
En buena lógica la corrupción ha de empezar por el pensamiento, las ideas.Veamos algunos textos bíblicos que parecen haber sido escritos para nuestros días y que demuestran cómo el hombre se vuelve retrógrado al abandonar a Cristo, la Sabiduría Encarnada:
“Vendrá un tiempo en que los hombres no soportarán la Sana Doctrina sino que, arrastrados por su propias pasiones, se harán con un montón de maestros por el prurito de oír novedades; apartarán sus oídos de la Verdad y se volverán a las fábulas (2Tim 4,3‐4).
De la corrupción del pensamiento se deriva la del corazón y dan frutos de malas obras:
“Has de saber que en los Últimos Días sobrevendrán tiempos difíciles porque habrá hombres egoístas, avaros, altivos, orgullosos, maldicientes, rebeldes a los padres, ingratos, impíos, desnaturalizados, desleales, calumniadores, disolutos, inhumanos, enemigos de todo lo bueno, traidores, protervos, hinchados, amadores de los placeres más que de Dios, que con una apariencia de piedad están en realidad lejos de ella”. (2 Tim 3, 1-4)
Con todo este bosque de adjetivos San Pablo describe un estado de corrupción social y religiosa alarmante, reflejada en nuestro Mundo actual. Sí, una gran mayoría de la juventud se rebela contra los padres y las instituciones, pensando sólo en vivir para el placer. Alarmante es el auge de los desnaturalizados. Inhumanos se han vuelto incontables gobernantes, médicos, padres y personal sanitario, apoyando el aborto, … y sin embargo, los que hacen legal este crimen van de buenos y respetables por la vida, y millones de personas les votan cuando llegan las elecciones.
San Pedro en el c. 2 de la Segunda Carta, prácticamente entero, describe el estado de corrupción de un futuro que puede concretarse en el c.3 con la clara alusión a los U.T.:
“Ante todo debéis saber cómo en los Últimos Días vendrán con sus burlas, escarnecedores que viven según sus propias concupiscencias, y dicen ¿Dónde está la promesa de su Venida? …”(2Pe 3,3-4)
“Como hubo en el Pueblo profetas falsos, así habrá falsos doctores que introducirán sectas perniciosas, llegando hasta a negar al Señor que los rescató… Muchos los seguirán en su libertinaje y por causa de ellos será blasfemado el camino de la Verdad….Harán negocio con vosotros con palabras mentirosas… van en pos de la carne llevados de deseos impuros, y desprecian la Autoridad del Señor (…) Atrevidos, arrogantes, no temen blasfemar de las potestades superiores… blasfemando de lo que no conocen, como animales irracionales, … hacen sus delicias de los placeres de cada día; hombres sucios, corrompidos, se gozan en sus extravíos mientras banquetean con vosotros. Sus ojos están llenos de adulterio, son insaciables de pecado, seducen a las almas inconstantes, tienen el corazón ejercitado en la avaricia, son hijos de maldición….
Dejando la senda recta se extraviaron … Son …fuentes sin agua, nubes empujadas por el huracán, a quienes está reservado el orco tenebroso. Profiriendo palabras hinchadas de vanidad, atraen a los deseos carnales a aquellos que apenas se habían apartado de los que viven en el error, prometiéndoles libertad, cuando ellos son esclavos de corrupción…Mejor les fuera no haber conocido el Camino de la Justicia, que después de conocerlos abandonar los santos Preceptos que les fueron dados”.
El texto es muy claro. No necesita comentario. Quizás fijarse en cómo en el último párrafo la corrupción está ligada a la Apostasía: “Dejando la Senda Recta se extraviaron…Mejor les fuera no haber conocido el Camino de la Justicia, que después de conocerlo abandonar los Santos Preceptos que les fueron dados” (2Pe 2, 1-21).
Jud 18-19.- La Epístola de San Judas nos habla de “lo predicho (profetizado) por los Apóstoles de Nuestro Señor Jesucristo. Ellos os decían que a lo Último del Tiempo (Últimos Tiempos) habría mofadores que se irían tras sus impíos deseos, … hombres animales, sin espíritu” (Ju 18-19).
Así es el modelo de ciudadano que pretenden formar con las mal llamadas leyes educativas del Mundo Occidental: un individuo que pueda satisfacer todos sus instintos sin más límite que la enfermedad o la violencia. Una sociedad corrompida como en tiempos del Profeta Jeremías:
-“Yo los harté y se dieron a adulterar, y se fueron en tropel a la casa de la prostituta. Sementales bien gordos y lascivos, relinchan ante la mujer de su prójimo”. (Jer 5, 7 y ss)
“Es ya público que entre vosotros reina la fornicación, y tal fornicación, cual ni entre los gentiles, pues se da el caso de tener uno la mujer de su padre” (1Cor 5,1)[2].
b- “Como en tiempos de Lot.- “Lo mismo en los días de Lot (será en los días del Hijo del Hombre): comían y bebían, (…) pero en cuanto Lot salió de Sodoma, llovió del cielo fuego y azufre, que los hizo perecer a todos (Lc 17, 28-29). Al extender el Evangelio en los comienzos de la Iglesia, los Apóstoles se encuentran con sociedades corruptas un tanto semejantes a los tiempos de Noé y de Lot:
Rom 1,18-32.- Aquí se habla, en un primer sentido, del castigo de la gentilidad precristiana al haber rechazado la Ley Natural; esta es la expresión de la Voluntad de Dios inscrita en el corazón del hombre. Pero la descripción que hace aquí S. Pablo tiene una ulterior interpretación, como es en estos Últimos Tiempos de Apostasía, en los que asistimos a un brutal rechazo de la Fe:
“…Son inexcusables por cuanto conociendo a Dios no le glorificaron como Dios ni le dieron gracias, sino que se entontecieron en sus razonamientos viniendo a oscurecerse su insensato corazón. Y alardeando de sabios se hicieron necios, y cambiaron la gloria del Dios incorruptible por la semejanza de la imagen del humano corruptible, y de aves, cuadrúpedos y reptiles [Cambiaron la adoración a Dios por la adoración al hombre y a los animales].
Por eso los entregó Dios a los deseos de su corazón, a la impureza con que deshonran sus propios cuerpos, pues trocaron la Verdad de Dios por la mentira, y adoraron y sirvieron a la criatura en lugar del Criador… Por lo cual los entregó Dios a las pasiones vergonzosas, pues las mujeres mudaron el uso natural en uso contra naturaleza; e igualmente los varones, dejando el uso natural de la mujer, se abrasaron en la concupiscencia de unos por otros. Los varones de los varones, cometiendo torpezas y recibiendo en sí mismos el pago debido a su extravío.
Y como no procuraron conocer a Dios, Dios los entregó a su réprobo sentir que les lleva a cometer torpezas y a llenarse de toda injusticia, malicia, avaricia, maldad; llenos de envidia, dados al homicidio, a contiendas, a engaños, a malignidad; chismosos o calumniadores, abominadores de Dios, ultrajadores, orgullosos, fanfarrones, inventores de maldades, rebeldes a los padres, insensatos, desleales, desamorados, despiadados; los cuales, conociendo la sentencia de Dios, que quienes tales cosas hacen son dignos de muerte, no sólo las hacen sino que aplauden a quienes las hacen”.
¡Qué actual es esto! En un medio informativo español de hace ya tiempo, un líder comunista se vanagloriaba de haber cometido “todos los pecados del Catecismo”. Y cuánto descaro y provocación, cuánto ridiculizar a la Moral de la Iglesia en tantas manifestaciones homosexuales. Recordemos la manifestación en Madrid, contra la visita del Papa Benedicto XVI en la Jornada Mundial de la Juventud. Una gran pancarta decía ¡Viva Satán! Y se oía cantar con descaro a grupos: “Soy pecador, pecador, pecador…”[3]
Detrás de la corrupción está siempre la persecución a la Iglesia. Estas palabras del Mensaje de La Salette (1.846) parecen escritas para nuestros días:
“Los gobiernos civiles tendrán todos un mismo designio, que será abolir y hacer desaparecer todo principio religioso para hacer lugar al materialismo, al ateísmo, al espiritismo y a toda clase de vicios”[4]
A estas alturas del siglo XXI el grado de maldad emula a los peores momentos de la Historia Humana. Hemos mencionado los tiempos de Noé y de Lot, los de la sociedad a la que se comienza a llevar la Luz del Evangelio. Pero en estos momentos se hace realidad también la conocida sentencia: “El hombre es un lobo para el hombre (Homo homini lupus)”[5]. El hombre actúa contra sí mismo con el aborto. Hoy en día los gobiernos violan los Derechos Humanos sin que nadie los castigue. Los gobernantes engañan a los súbditos en las campañas electorales, y no parece que haya una Justicia independiente que defienda al Pueblo.
Parece ser que el Covid 19 no es un virus natural sino prefabricado, y anunciado ya años antes de extenderlo por el Mundo. Dicen que la “plandemia” ha sido una excusa para privar a los individuos de sus libertades fundamentales. Lo mismo ocurre con las polémicas vacunas, que no inmunizan. Muchos están convencidos de que pueden modificar el ADN humano. ¿Pretenden transformar los seres humanos en robots? Hay políticos que quieren hacerlas obligatorias. ¿No está emergiendo un consenso de gobiernos genocidas? Creo que lo de “Homo homini lupus” ha quedado ya muy superado en las clases dominantes. Podríamos decir: “Homo homini diabolus”: El hombre se ha convertido en un demonio para el hombre. Pero continuemos contemplando el negro panorama en el siguiente apartado.
[1] Mensaje de la Virgen del Pino, en Ávola (Italia) 09.04.2010.
[2] “La mujer de su padre”: la madrastra.
[3] Organizada por “Europa Laica”, la “Asociación Madrileña de Ateos y Librepensadores” y “Redes Cristianas (¡¿?!)”el 17 de agosto de 1911.
[4] Mensaje de la Salette, p.17.
[5] De Thoma Hobbes, filósofo inglés del siglo XVIII, en su obra El Leviatán (1651).
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Fuente: mensajerosdelavida.es
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